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El proyecto de minería en Tetlama “es un proyecto estratégico” por parte “de una minera “responsable”, porque no sólo está buscando metales preciosos, sino que además representa un detonante económico y social para la zona, coinciden expertos y actores sociales y políticos, incluido el presidente de la Comisión de Minería y Desarrollo Regional del Senado de la República, Miguel Ángel Lucero Olivas.

“Es lo que llamamos un plan estratégico, una minería responsable que no vaya únicamente en busca de las riquezas y agote el resto de los recursos. Que básicamente se establezcan donde hay condiciones a una buena temporalidad, que permita el desarrollo de las comunidades y a la vez otras actividades productivas”, sostiene.

“Recordemos que en estos momentos la economía está siendo blindada de una manera diferente: los indicadores macroeconómicos que antes se buscaban, se maquillaban y se engañaba, ya no se están dando. Ahorita se está dando lo que se llama un fondeo de la economía a través de recursos que están inyectados a la población, desde abajo”, dijo el político.

Dijo que el sector minero representa a “una de las industrias más vigiladas para que cumplan con la normatividad en todos los sentidos. Y esto es por los propios riesgos de la explotación minera. En ese sentido, hay regulaciones desde el punto de vista ambiental, hasta sobre el uso de explosivos, cuestiones laborales y toda una regulación. Es fundamental socializar el sector y quitarnos las ideas preconcecibidas de cómo se estaba dando esta actividad”.

Dijo que es un tabú el hecho de que se relacione a la minería con la contaminación. “Ahorita a mucha gente le hablas de minería y visualiza de inmediato contaminación ambiental, cuando las regulaciones hacen que la industria minera bien llevada sea de las mayores protectoras de la biodiversidad”, concluyó.