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Hoy, los esfuerzos de sustentabilidad corporativa se enfocan en empresas de consumo, retail, tecnología y combustibles fósiles. Pero la minería fue uno de los primeros grandes sectores donde también se implementaron medidas regulatorias para proteger el medio ambiente.

¿Dónde están esos esfuerzos ahora? La agenda actual de sostenibilidad no está siendo ignorada por los mineros, y ya están aprovechando varias oportunidades (junto con algunos retos) de este nuevo modelo empresarial.

De acuerdo con el Centro de Estudios del Cobre y la Minería, la producción de cobre producirá 26 mil 500 millones de toneladas en 2019. El mayor productor es Chile —seguido por Zambia, la República Democrática del Congo, China y México— extrayendo el 25 por ciento por ciento del total global; y sólo China compra del 45 por ciento al 60 por ciento del cobre mundial.

Estas cifras exponen el gran trabajo de la industria minera en la economía, y por tanto las repercusiones ambientales —el uso de agua, energía, generación de residuos y daño a la tierra— de este sector en el planeta.

Los mineros tienen mucho que perder si no cumplen con las normativas ambientales para proteger los recursos naturales, reducir sus emisiones contaminantes y transparentar sus prácticas de trabajo. Además, también deben considerar los siguientes factores:

* La riqueza del cobre mundial ya está por debajo del 1 por ciento; es decir, no queda mucho material por extraer.

* La concentración del cobre se redujo 25 por ciento entre 2006 y 2016, pero la producción incrementó 30 por ciento y la energía para extraerlo aumentó 46 por ciento.

* Las excavadoras y transportes de minerales dependen de combustibles fósiles para funcionar.

* Se utilizan grandes cantidades de electricidad para moler y refinar cobre y aluminio; y carbón para fundir hierro y crear acero.

* Las próximas décadas verán un incremento dramático en la población mundial: alcanzaremos las 9 o 10 mil millones de personas, por lo que necesitaremos extraer más recursos del subsuelo.

Afortunadamente, la economía verde está creando nuevas oportunidades de crecimiento en este negocio para satisfacer la demanda, sin perjudicar a la Tierra.

Las alternativas

Las baterías de los vehículos eléctricos necesitan cobre para funcionar, y utilizan cuatro veces menos cobre que los motores de combustión interna. Este es un mercado que los mineros pueden aprovechar, al mismo tiempo que implementan prácticas de sustentabilidad en el proceso.

Otro beneficio de la minería sustentable sería la reducción de los “estanques de relave”: los charcos que mantienen aquellos residuos de metales que son demasiado pequeños para procesarse. Por ejemplo, la compañía minera ERG desarrolló un método para reprocesar los estanques de relave para reprocesar el cobalto y cobre de los residuos más grandes del mundo.

En México, el proyecto Minería Sustentable y Medio Ambiente busca analizar el impacto de las actividades mineras en las áreas protegidas del país. Primero, buscan desarrollar una cartografía temática especializada, con información estadística relevante a las concesiones mineras; y difundir los hallazgos para mejorar la toma de decisiones, en materia de minería sustentable.

Tampoco se puede olvidar el reciclaje. Las Naciones Unidas estiman que, libra por libra, los residuos electrónicos contienen de 40 a 800 veces más oro que una mina de oro. Por tanto, los mineros pueden idear nuevas soluciones de reciclaje para recuperar ese mineral desperdiciado.

Uno de los principales retos de la próxima década será crear soluciones de economía sustentable para desarrollar y utilizar energías renovables, así como generar nuevas ventajas competitivas, a través del reciclaje industrial. Mexpo está involucrado en este futuro. Ofrecemos soluciones profesionales para reciclar y recuperar metales ferrosos y no ferrosos de forma rentable y con éxito. Únete a nosotros y cambiemos el mundo apra un mejor futuro.