Masiosare agencia de noticias

Data center, por donde viajan nuestros correos electrónicos, mensajes, etc - Foto: Foto: Especial

Más allá de la Twitósfera: El mito de lo “paperless”

Sólo el hecho de usar la computadora contamina por los data centers, instalaciones enormes con filas de servidores que requieren mucha energía; son responsables del 1% del consumo mundial energético

Por: Estefanía Capdeville, Visitas: 962

Compartir la nota por:

 

Hace algunos años, alguien nos convenció que utilizar nuestras computadoras en lugar de trabajar con papel era “eco-friendly”. Tanto así que hoy en día sería impensable imprimir un artículo o una presentación que puedes leer en la pantalla. Pero la verdad es que utilizar la computadora o cualquier aparato electrónico no es ecológico, de hecho, sólo por la actividad de enviar y recibir email, el mundo agrega anualmente el CO2 equivalente a 7 millones de automóviles.

Y para que se asusten, según datos de la BBC Science Focus, enviar 65 correos equivale a la contaminación de conducir un kilómetro en coche. Y esto aumenta si el correo lleva adjuntos.

Dejando de lado que la producción de los equipos electrónicos contamina y toda la electricidad que necesitan para funcionar -electricidad que se produce con energías sucias todavía- nuestra actividad online contamina por una sencilla razón: los data centers.

Los data centers, son a donde viajan los correos, mensajes y whatsapps que enviamos. Son instalaciones enormes con filas y filas de servidores que contienen toda nuestra información. Estos data centers requieren de muchísima energía, no solo por los aparatos electrónicos que utilizan, sino porque los servidores requieren mantenerse a una temperatura baja para no descomponerse.

Los data centers son responsables por el 1 por ciento del consumo de energía en el mundo y del 3.2 por ciento de los gases de efecto invernadero. Para darnos una idea del problema, la huella medioambiental de los datacenters es comparable con la de la industria de la aviación.

Y en este sentido, han comenzado a salir soluciones. Google lleva la batuta en este tema. Según el gigante tecnológico, con su tecnología de inteligencia artificial ha logrado reducir hasta en un 30% el consumo de energía para enfriar los data centers y su compromiso es utilizar electricidad limpia en todas sus instalaciones para 2030, es decir, lograr ser carbon-free.

Y esta parece ser la solución para reducir nuestra huella medioambiental: energía eléctrica limpia. No vamos a poder reducir nuestra producción de datos, todo lo contrario, nuestra vida online aumenta cada día, y más ahora en tiempos pandémicos. Lo que sí podemos hacer es exigir a gobiernos y empresas que nos vendan electricidad limpia - porque nadie puede producir su propia electricidad . Porque en este nuevo reto ecológico, no podemos depender de las decisiones individuales de las personas que nos esforzamos por no imprimir.

Para más ideas inconexas, en @yeyicapdeville

 

Lo último

También podría interesarte

Política

Covid-19: Montan hospital móvil para que Cuauhtémoc Blanco grabe un spot

El nosocomio fue armado en el Estadio Centenario sólo para la grabación; dice la Secretaría de Salud que fue “un simulacro”; el promocional lanzado en redes sociales estaría violando la Constitución federal, en cuanto a propaganda de gobernantes

Política

Morelos: Pacientes de Covid-19 firman su consentimiento para morir

En el protocolo para ingreso de pacientes al Hospital Parres, se establece que todos los casos deben firmar una hoja en la que están de acuerdo en no ser resucitados en caso de accidente cardiopulmonar; es un documento oficial de la Secretaría de Salud

Política

Covid-19, castigo por aborto, eutanacia y niños trans: Obispo

Dios nos está gritando a través de la pandemia para que hagamos un alto y reflexionemos, por jugar a ser Dios; en España, prefirieron la marcha del 8 de marzo a prevenir el coronavirus: “Ándale chiquito, para que se te quite”, afirma

Política

Atacan terminal de autobuses; hay cinco muertos

Según los primeros reportes, las víctimas esperaban abordar un autobús; se trata de jóvenes de entre 25 y 30 años; la central camionera se ubica en Las Palmas, al sur del centro de Cuernavaca