Masiosare agencia de noticias

Una novela rusa, de Emmanuel Carrère - Foto: Foto: Especial

Platiquemos de libros: Una novela rusa

Emmanuel Carrère publicó su obra Una novela rusa, en la Editorial Anagrama, como segunda edición en Compendium, en Barcelona, España, en octubre de 2018

Por: Carlos Garza Falla, Visitas: 1503

Compartir la nota por:

 

El pasado 30 de agosto del 2020 publiqué aquí en Masiosare Platiquemos de libros: El adversario de Emanuel Carrère, en ese texto podrán leer cómo fue que gracias a Javier Sicilia conocí a Carrère, cuando me recomendó la lectura de su libro El Reino y también cómo esa lectura me llevó a buscar otros libros suyos, lo que me condujo a encontrarme con una edición de Anagrama que contiene tres: El adversario es el primero; Una novela rusa el segundo y De vidas ajenas el tercero y pues hoy quiero que platiquemos de Una novela rusa, cuya lectura acabo de concluir en estos días.

La lectura de esta última me llevó un poco más de tiempo que un libro de esas dimensiones (255 páginas en la edición que tuve conmigo) me suele llevar. Parte de la explicación se debe a la costumbre que tengo desde hace ya varios años de leer entre tres y cuatro libros simultáneamente.

Mi lectura de Una novela rusa de Carrère, fue acompañada por la lectura de La novela de mi vida de Leonardo Padura la cual también ya concluí, por Cien años de Soledad de Gabriel García Márquez y por Vida y destino de Vasili Grossman, y lo menciono porque creo que sin pretenderlo al leerlos simultáneamente se apoderó de mí un ambiente por momento sumamente denso y también complejo.

De La novela de mi vida de Leonardo Padura ya hemos platicado aquí, y pronto espero lo hagamos de mi tercera incursión en Cien años de soledad y de Vida y Destino.

Una novela rusa fue publicada en 2007, es posterior a El adversario y antecede a De vidas ajenas y a El Reino.

Lo que el lector encuentra en Una novela rusa es un entramado de narraciones que están entretejidas por el narrador, el cual es Carrère, interpelándose, analizándose, encuerándose, dejándose ver como a ratos él mismo se mira.

“… ¿qué hay detrás de Una novela rusa?” se pregunta Juan Manuel Villalobos en una espléndida reseña que hace de la misma, publicada en Letras Libres el 31 de diciembre del 2008 https://www.letraslibres.com/mexico/libros/una-novela-rusa-emmanuel-carrere y se responde: “ Hay un libro sincero –ahora que es tan difícil encontrarlos–, atrevido, valiente, brutal, el striptease de un escritor, de un periodista –ciertamente egoísta, ciertamente egocéntrico: pero, bah, finalmente es un escritor, no un ebanista–, ante lectores, antes críticos, ante quien quiera leerlo, familia, amantes, amigos, hijos, desconocidos, y que desvela un mundo desprotegido, terriblemente frágil, que hace paradójicamente de este un libro puro, libre, que esconde una sorpresa tras otra, como las matrioshkas que esconden una caja dentro de otra, para enseñarnos que en todo pueblo, por perdido que esté, hay un misterio y un secreto terrible –hay un crimen– y vidas solitarias y violentas, pero también ternura, amor, compasión, porque tal y como dice George Steiner de los hogares: “En todas las casas hay un tesoro”. Ese tesoro, pues, de Kotelnich parece que está escondido y es a Carrère a quien se le va la vida por encontrarlo; por encontrarse”.

Una segunda lectura de Una novela rusa de Emmanuel Carrère , más sofisticada que la de Juan Manuel Villalobos la encontré en internet en el Blog de Juan Carlos, tomo de ahí y reproduzco a continuación la Estructura de la novela que abstrae Juan Carlos, el autor del blog de referencia.

“Los contenidos de la novela se organizan en siete capítulos, centrándose cada uno de ellos en un asunto principal:

1. La historia del soldado húngaro del psiquiátrico de Kotilnech, Andras Toma.

2. La historia de los orígenes familiares de Emmanuel Carrère, con especial parada en el abuelo georgiano, Georges, y su nada explicada desaparición.

3. El relato erótico que Carrère escribe en el diario Le Monde para que sea leído un día exacto en un lugar exacto por Sophie con la que mantiene una tormentosa relación.

4. El equipo de TV comandado por Carrère retorna a Kotelnich para realizar un reportaje amplio que transmita con fidelidad la realidad de la vida en ese lugar.

5. El regalo para Sophie que suponía el cuento erótico escrito en “Le Monde” va a volverse en contra de la relación. La relación entre ambos es tan difícil que deciden separarse a pesar del grandísimo amor que ella le tiene a él.

6. Tercera estancia en Kotelnich. Para asistir al entierro de una joven asesinada y dar completa finalización a lo que ahora ya será película, Carrère y su equipo vuelven a la ciudad rusa. En paralelo y complementando a la pareja de Carrère y Sophie, vemos la difícil relación entre Sasha Kamordin, un miembro del FSB local y Ania, traductora de francés al ruso que desde la primera visita acompañara a los franceses de la TV en la olvidada localidad de la Rusia profunda en la que están presentes aún todos los demonios heredados de la antigua URSS (Chechenia, contaminación, Afganistán, locura, alcoholismo). Ambas parejas son complementarias dentro de la narración

7. Especie de corolario o colofón en el que todo se resuelve”.

Renglones más adelante Juan Carlos cierra la entrada de su blog dedicada a este libro con la siguiente reflexión final: “Esta novela, compleja donde las haya, que no se deja acotar y que se escapa como el agua por entre los dedos, sólo tiene para mí un sentido: Carrère ha buscado ordenar sus vivencias, sus dudas, sus locuras, sus insatisfacciones, liberarse del peso terrible que para él supone (ahora ya, suponía, creo yo) la figura de su madre tan respetada en Francia, buscar sus orígenes y asumirlos, conocer los motivos por los cuales él sabe algo de ruso, siente deseos de saber más y recuerda una nana que de pequeño le cantaban en ese idioma. En definitiva, al igual que la novela se nos muestra haciéndose, y el film sobre Kotelnich montándose, todo este gigantesco rompecabezas le ha servido al autor para mostrarse ante todos, pero sobre todo ante él mismo, ya seguro de sí al haberse liberado de las neuras, los complejos y los atavismos que le atenazaron durante años”.

Suscribo lo que he citado de Juan Manuel Villalobos y de Juan Carlos y confieso que ambas apreciaciones me han ayudado a ordenar mi lectura de este para mi tercer libro de Carrère y entender que la fuerza de su escritura está en que se vive y se asume como un escritor desencarnado, como un escritor descentrado, como un escritor que antes de serlo es hombre y que es precisamente su naturaleza humana la que va dejando huella en las palabras que entretejidas le ofrecen al lector una narración que lo atrapan, y en ese atraparlo juega con sus sentimientos.

Hay momentos en los que los que el ritmo de la narración de Una novela rusa comunica tedio y aburrimiento de su autor, quien, es claro, está en una meseta de tedio y aburrimiento y así se lo contagia al lector. Pero también hay momentos en los que es claro que quien narra está poseído por la euforia y por el erotismo y así se lo contagia al lector.

Una novela rusa no es un libro de lectura fácil, sin embargo, al concluirlo se queda uno con la idea de que fue compañero, colega, cómplice del narrador y ello le regala a uno la oportunidad de vivir una experiencia única.

Sin duda Una novela rusa de Emmanuel Carrère es un magnifico pretexto para que platiquemos de libros.

Twitter. cgf59

Facebook: Carlos Garza Falla

Instagram: Carlos Garza Falla.

carlosgarzafalla@gmail.com

 

Lo último

También podría interesarte

Opinión

Hombres, guardemos silencio, reflexionemos

El feminismo no es contra nosotros, es por ellas, las están matando; ¿cuántas veces, usted amigo, ha participado por acción o por omisión, en agresiones contra mujeres? ¿Cuántas veces hemos sido cómplices?

Política

Covid-19: Montan hospital móvil para que Cuauhtémoc Blanco grabe un spot

El nosocomio fue armado en el Estadio Centenario sólo para la grabación; dice la Secretaría de Salud que fue “un simulacro”; el promocional lanzado en redes sociales estaría violando la Constitución federal, en cuanto a propaganda de gobernantes

Política

Morelos: Pacientes de Covid-19 firman su consentimiento para morir

En el protocolo para ingreso de pacientes al Hospital Parres, se establece que todos los casos deben firmar una hoja en la que están de acuerdo en no ser resucitados en caso de accidente cardiopulmonar; es un documento oficial de la Secretaría de Salud

Opinión

Responsabilizarlas a ellas. El caso Mariana

Medios de comunicación reportaron que a Mariana Leticia, joven asesinada el 10 de mayo pasado, la mataron porque no quiso tener relaciones sexuales. Es mentira, la mataron porque la sociedad cree que las mujeres no valen